Acá en Colombia hay un tema legal también alrededor de las historietas que habría que resolver para conseguir una iniciativa de fomento a ese arte por parte del Estado. Me refiero a la Ley del Libro (Ley 98 de 1993), aprobada y celebrada como una ley de apoyo a la creación, escritura, publicación, fomento y difusión de material impreso o en formato electromagnético. Suena bien, ¿verdad? Bueno, como de eso tan bueno no dan tanto, tenemos la siguiente perla en el Artículo 2 de dicha ley:
Se exceptúan de la definición [de libros, revistas, folletos, coleccionables seriados, o publicaciones de carácter científico o cultural] "los horóscopos, fotonovelas, modas, publicaciones pornográficas, tiras cómicas o historietas gráficas y juegos de azar".
Como ven, para el Estado las historietas no tienen carácter de libro y según la ley, no aportan a la cultura. Por supuesto, ya se han manifestado las primeras voces de protesta y hay un grupo que ha tomado la vocería para demandar este ley y conseguir que la historieta sea vista como un elemento de cultura y no simple ocio, de forma que pueda hacerse a los beneficios e incentivos (incluyendo la exención del IVA) que esta ley promueve. Uno de los impulsores de este grupo, Keto, Director Ejecutivo de El Cómic en Línea, explica sus objetivos en este fragmento, tomado de su artículo titulado La debida aclaración:
Queremos demandar el que las tiras cómicas y las historietas gráficas (e incluso la fotonovela) sean excluidos de los beneficios de la ley, porque no son temas o géneros reprochables, sino que son medios de comunicación. Censurar por temática, aunque discutible también, es válido. Pero censurar por medio, no es aceptable.
Lo fundamental es que para nosotros el cómic no se limita a un género, ni a un tema, ni a un estilo. El cómic es un medio que permite muchas y muy amplias formas de expresión – ustedes lo tienen aún más claro que yo.
Ahí les contaré que pasa con todo esto. ¡Hasta una próxima!
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